sábado, 21 de mayo de 2011

GATTACA... ficcion o realidad

En un panorama cinematográfico en el que los efectos especiales parecen ser argumento suficiente para una película y los buenos guiones brillan por su ausencia Gattaca aparece como un pequeño oasis de buen cine completamente ignorado por el gran público.


El planteamiento de Gattaca es una vuelta a los esquemas básicos de la Ciencia-Ficción. La película recoge un tema de interés en el mundo que vivimos y lo traslada a un futuro hipotético con el fin de poner de manifiesto los diferentes aspectos del objeto de debate: la manipulación genética.


Las premisas: "En un futuro no muy lejano..."


En un futuro no muy lejano los seres humanos son creados a partir del genoma de sus padres, que es seleccionado con el fin de obtener lo mejor de cada uno de ellos.

No es una eugenesia absoluta como la del "Mundo Feliz" de Huxley; los niños del mundo de Gattaca son auténticos hijos de sus padres. Sin embargo han sido manipulados para eliminar cualquier posible rastro de imperfección, como podrían ser la miopía, la calvicie, el alcoholismo, el cáncer o, incluso, la violencia.
La película nos muestra una sociedad aséptica y ordenada donde la contaminación ha desaparecido, las energías son renovables y no hay motivo para suponer violencia o delincuencia. Nos encontramos en la antesala de un mundo aparentemente perfecto. Pero esta perfección ha sido obtenida a costa de cualquier vestigio de humanidad. Los personajes de Gattaca son fríos; sus relaciones, asépticas...

En el mundo de Gattaca uno no puede escapar a sus genes. Por supuesto, la marginación es ilegal (se denomina genomismo) pero un análisis de substancias orgánicas (no siempre legal) es la llave final que abre o cierra las puertas al futuro de cada uno. De forma un tanto irónica, en el mundo de Gattaca el hombre es marginado, de forma perfectamente racional, por la propia ciencia.

En este orden de cosas la casta más marginal del sistema es aquella formada por quienes han sido concebidos de forma natural. En un mundo de hombres y mujeres casi perfectos, estos seres, conocidos como "Hijos de Dios", son relegados a las tareas inferiores a causa de sus imperfecciones.


OPINIÓN:


Todo esto que nos parece tan lejano no lo es tanto. La investigación del genoma humano, recientemente catalogado al completo, es la puerta que abre la cura a una gran cantidad de enfermedades, pero que permite también investigar de forma inquietante nuestro interior.

Hace ya algunos años que el Reino Unido prohibió la utilización de análisis genéticos a la hora de contratar seguros de vida o de enfermedad, y sin embargo, el hecho de que se haya tenido que prohibir muestra lo cerca que estamos de que sea una realidad.

Y, sin embargo, si podemos evitar que nuestros hijos sufran hemofilia, cáncer o miopía, ¿por qué no hacerlo? El hombre ha luchado siempre en contra de la enfermedad, buscando una cura para sus males. ¿Dónde está, entonces, el límite?

Los hombres y mujeres de Gattaca son más sanos, más fuertes, viven mejor. La película trata el tema sin emitir ningún juicio, simplemente mostrando las posibilidades que ofrece la ciencia. No cae en la tentación fácil de criticar los avances negando las ventajas de cualquier posible progreso. Gattaca se limita a mostrar, dejando todo juicio en manos del espectador.


¿Qué es el hombre?
En cierto modo la película hace incapié en un problema mucho más básico: ¿Qué somos en realidad? El hombre, el ser humano, ¿es tan solo su código genético o es algo más?

El protagonista lucha con todas sus fuerzas por lograr aquello que, se supone, le es inalcanzable. Esta lucha por lo imposible es el motor de la película. No sólo es el argumento principal de la historia, sino también de muchos de los pequeños sucesos que ocurren a lo largo de la misma: Vincent cruzando una carretera pese a que su miopía le impide ver los coches, Gerome subiendo por la escalera de caracol, pese a la parálisis de sus piernas...

A lo largo de toda la película se plantea esta duda, que va más allá de toda investigación científica. ¿Es el hombre una máquina más, medible, cuantificable? ¿Se puede definir un estándar humano, definir un hombre ideal del cual todos los demás no son sino aproximaciones cuantificables? ¿Somos un porcentaje respecto a un ideal dado o somos algo más?

Vincent parece negar esta posibilidad. Su lucha y su esfuerzo le permiten romper los límites que se le han asignado de manera totalmente científica. ¿Acaso esos límites habían sido mal definidos o es que el error es la simple idea de considerar al hombre como algo que puede ser objetivamente medido?



2 comentarios:

  1. Es de admirirar y al mimo tiempo de atemorizarce por tantas cosas que ha hecho la ciencia con tal de obtener respuestas a sus objetivo. el hombre se a visto influenciada por la misma hatsa tal punto de querer cambiar su ¨ imperfección ¨ por una completa y sincera vida de mejoramiento y perfeccion. llegando a tal punto de que el hombre es un algo que puede ser medido. nos hemos convertido en maquinas de nosotros mismos siendo nuestro propio gen destruido o sustituido por otro al que tendremos que avoplarnos.

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